ES MEJOR PREPARARSE PARA EL FUTURO....Y CON TIEMPO. Combatir la inseguridad ciudadana, que tanto afecta la calidad de vida de todos los peruanos e impide el desarrollo de las actividades productivas, es un reiterado reclamo social. La sociedad está inconforme y exige acciones concretas e inmediatas, que disminuyan los índices de criminalidad; eviten la violación de los derechos humanos; erradiquen la corrupción e impunidad; garanticen la estricta aplicación de la ley y propicien el respeto y la convivencia armónica de todos los sectores sociales. Ante los grandes retos en materia de seguridad ciudadana, es necesario plantear nuevos enfoques y reorientar la política criminal hacia un concepto que comprenda de manera prioritaria e integral la prevención del delito como eje principal de la política en materia de seguridad ciudadana, pero aplicables en todo el Perù. La incidencia delictiva ha ido en aumento durante los últimos años; esto ha generado un clima de inseguridad que pone en riesgo la vida y el patrimonio de las personas. Y cuando se piensa en la Policía y su labor frente al delito, ya no podemos pensar que Lima es todo el PERU, la Policía no puede enfrentar el delito a través de la investigación, ubicación y captura de delincuentes - como siguen manifestandolo algunas autoridades del sector interior -, porque esa etapa transitoria permitida por el Cronograma de Implementación del Nuevo Código Procesal Penal (NCPP), es solo eso, una etapa transitoria, en tanto ya el NCPP se encuentra vigente en Huaura, La Libertad, Moquegua, Tacna, Arequipa y al año 1013 en que llegará a Lima se habrá completado su aplicación en todo el Perú y esos procedimientos ya no se pueden seguir aplicando. Hay que pensar en la modernidad, hay que cambiar de ideología totalmente, la investigación policial del delito ya no es ni será trabajo de la Policía Nacional, porque la etapa de la investigación policial del delito y la elaboración del Atestado Policial, han desaparecido con el nuevo modelo proceso penal. El NCPP, requiere el apoyo de la Policía para realizar labores de investigación preliminares que se encuentran a cargo del Fiscal, en especial relacionadas con la protección de las evidencias, pero de manera particular para participar con sus laboratorios de criminalìstica y peritos en la investigación científica del delito, en la identidad del autor del hecho criminal y en las diligencias que disponga el Fiscal a cargo de la investigación. Es tiempo de modificar la estructura organizacional, cultural, funcional, inclusive de infraestructura de la PNP y diseñar un modelo de Policía del Ministerio Público y Criminalìstica que trabaje directamente con los Fiscales y los apoye en sus tareas de investigación, paralelamente se debe capacitar a todo el personal de la Policia quienes en la practica son los primeros en intervenir frente a un delito para que lo hagan de la manera adecuada y concordado con los procedimientos del NCPP, las instancias especializadas de investigación policial del delito actualmente existentes, deben ser reorganizadas, y reasignarse al personal policial excedente a tareas de prevención del delito. No hacerlo a tiempo o no hacer nada como sucede actualmente, viene significando un dispendio de recursos humanos y logísticos, que a la larga constituye un caso mas de lamentable desidia de los mandos policiales - "dejar hacer dejar pasar" -, tan igual como viene sucediendo - por mencionar un solo caso - con las Secciones de Tránsito existentes en la Comisaría. El Código de Procedimientos Civiles de 1993 en sus disposiciones modificatorias y derogatorias, dejó sin efecto las atribuciones policiales de intervenir y recibir denuncias por Accidentes de Tránsito con Daños Materiales, a partir de dicha fecha estos hechos se resuelven por la vía civil siendo competentes los juzgados de paz o civiles de acuerdo a la cuantía; sin embargo las Comisarías siguen recibiendo estas denuncias y realizan las diligencias correspondientes de manera innecesaria, para finalmente archivarlas u orientar a las partes a efectuar transacciones, por cuanto ya no son competentes para tramitar ningún tipo de documentos por estos hechos. Nadie dice nada al respecto y se utilizan recursos humanos y logísticos en tareas intrascendentes, mientras que en las calles de las ciudades la delincuencia hace de la suyas.
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